LaBiblia usa una expresión fuerte y dice «una sola carne», tan íntima es la unión entre el hombre y la mujer en el matrimonio. como el baño de bodas (cf Ef 5,26-27) que precede al banquete de bodas, la Eucaristía. El Matrimonio cristiano viene a ser por su parte signo eficaz, sacramento de la alianza de Cristo y de la Iglesia.
Elmatrimonio sacramental cristiano, indisoluble, en el que el marido ha de imitar con respecto a la mujer el amor de Cristo por la Iglesia (Ef., 5, 25), El Protestantismo es, ha de decirse, una clase de Cristianismo
Elmatrimonio cristiano "consolida, purifica y eleva" las características de todo amor conyugal. Nuevo artículo de la serie sobre el amor humano.
Elmatrimonio es la íntima unión y la entrega mutua de la vida entre un hombre y una mujer con el propósito de buscar en todo el bien mutuo. Dicha relación tiene sus raíces en la voluntad original de Dios quien al crear al hombre y a la mujer a su imagen y semejanza, les dio la capacidad de amarse y entregarse mutuamente, hasta el punto
Elmatrimonio. TEMA 25. El matrimonio. La íntima comunidad de vida y amor conyugal entre hombre y mujer es sagrada, y está estructurada según leyes establecidas por el Creador, que no dependen
Elmatrimonio supone la mutua entrega total entre los dos contrayentes. Esa totalidad de la entrega conyugal abarca también el tiempo. Como indica el c. 1056, en el matrimonio cristiano quedan como reforzadas en virtud del sacramento. Existe una clara relación entre los fines naturales y las propiedades esenciales.
Elmatrimonio cristiano en la biblia. El matrimonio de los bautizados tiene un significado simbólico. Él es el símbolo del amor y la alianza de Cristo y la Iglesia. El
ElMatrimonio cristiano manifiesta y encarna el amor nupcial de Cristo por la Iglesia: "Maridos, amad a vuestras mujeres como Cristo amó a la Iglesia" (Ef 5,25), dando la misma vida por ella.
Eléxito en el matrimonio y la Palabra de Dios jhoanirave2013 La mujer cristiana y el hogar. La mujer cristiana y el hogar Raquel Bertañan
Sacramentogrande en Cristo y en la Iglesia, dice San Pablo, y, a la vez e inseparablemente, contrato que un hombre y una mujer hacen para siempre, porque —queramos o no— el matrimonio instituido por Jesucristo es indisoluble: signo sagrado que santifica, acción de Jesús, que invade el alma de los que se casan y les invita a
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